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Casa Coleman – La casa

Según la ordenanza 7959/94 sobre creación del Registro Municipal para la preservación del Patrimonio Arquitectónico y Urbano del Partido de Bahía Blanca, Casa Coleman fue integrada al inventario patrimonial de la ciudad, considerando para ello aspectos tales como calidad arquitectónica, antigüedad constructiva, y referencia histórica a partir de reconocer que la vivienda fue habitada por el Sr. Arthur Henry Coleman, personaje de la vida bahiense que durante la primera mitad del siglo pasado contribuyó al desarrollo no solo de la ciudad sino también de la región.

Según figura en el plano aprobado por Obras Sanitarias el 9 de septiembre de 1926, la vivienda se encontraba en construcción a cargo de la empresa Constructora “Cabre”. El proyecto fue realizado por el Estudio F. Marseillan y presenta características eclécticas en su lenguaje con rasgos pintoresquistas. Su implantación está exenta de los muros medianeros, generando que el espacio exterior sea protagonista de la composición arquitectónica. Formalmente reconoce un interesante juego de retiros y aterrazados en todo el perímetro de la obra.

Su dueño original, el Sr. Juan de León, de nacionalidad española, imprimió su impronta al introducir en la decoración de la vivienda una cantidad importante de figuras de leones, por lo que el inmueble pasó a ser llamado la casa del león en una deformación evidente que sólo reconoció estas figuras ornamentales.

Como mencionamos al principio de la introducción la vivienda fue habitada por el Sr. Coleman, de nacionalidad inglesa quien llegó al país a fines del siglo XIX, más específicamente el 7 de noviembre de 1887, para prestar servicios en la empresa de capitales ingleses Ferro Carril del Sud. Después de haber ocupado varios puestos en distintas localidades de la provincia y capital federal llegó como sub inspector de tráfico, en el año 1894 a la sección “El Puerto” (actualmente Ing. White). Fue allí donde empezó a tener contacto con la sociedad bahiense y el desarrollo de la infraestructura de mayor importancia con la que se equipó a la región.

Su radicación definitiva en la ciudad se produjo el 25 de marzo de 1905 asumiendo el cargo de superintendente seccional de la ciudad. El primer período de tiempo habitó en el Hotel Londres, sito en la esquina de las calles O’Higgins y Chiclana, habiendo dejado a su familia en su residencia en Temperley.

Hacia el año 1931 la flia. Coleman adquiere la vivienda de la avenida Alem N°41, y la propiedad se convierte en marco de importantes celebraciones sociales, recibiendo a todo tipo de personalidades que pasaron por la ciudad, de lo cual se conservan registros fotográficos publicados en el libro que escribiera el dueño del inmueble.

Coleman se relacionó a la actividad ferroviaria durante 67 años de su vida, iniciándose en sus servicios en su país nativo Gales, y por seis décadas fue miembro de la empresa Ferro Carril del Sud. El alejamiento en sus funciones tuvo lugar el 15 de febrero de 1949 año en el que accedió al beneficio de la jubilación.

Dos décadas después del fallecimiento del Sr. Coleman, en 1972 el edificio fue adquirido por el CONICET, funcionando durante 25 años el Instituto Argentino de Oceanografía (IADO), hasta su traslado al CRIBABB en el año 1997. En este punto se inicia un largo período de abandono de la propiedad hasta el momento en el que FUNDASUR y el CONICET acuerdan llevar adelante un proyecto museístico-educativo-cultural que incluyó la recuperación y puesta en valor del edificio.